Normalmente los carros grandes, especialmente los de servicio público, cuando están dando reversa tienen un pito, ruidoso e incomodo, que llama la atención de las personas, advirtiendo que está dando reversa, en estas ocasiones la visibilidad del conductor es prácticamente nula.
Los sensores de parqueo, son dispositivos que trabajan con tecnología ultrasónica y electromagnética, que brindan una mejor maniobrabilidad en el momento de parquear su vehículo. Estos sensores están ubicados en el parachoques trasero del carro y pueden ser entre 2, 4, 6 e incluso más. Normalmente funcionan “direccionalmente” es decir sólo detectan obstáculos de frente al sensor, por lo que a mayor cantidad de sensores, mejor va a ser el cubrimiento.
Los sensores de parqueo están conectados a un “modulo eléctrico” a través de cables, el cual traduce las señales ultrasónicas o electromagnéticas que detectan los sensores en señales audibles o visibles, las cuales pueden ser luces LED o un espejo retrovisor, adicional, al que ya tiene el vehículo y que se instala sobre el existente.
También existen sensores de detección electromagnética, el cual consiste en una tira de aluminio que se fija en todo el parachoques, cubriendo así la totalidad de posible contacto, que necesita conocer el conductor.
Tenga claro que la lluvia, el barro y la suciedad en general pueden afectar la sensibilidad de los sensores, por lo que debemos estar pendientes que estos no tengan ningún obstáculo que afecte su buen funcionamiento. No sobra aclarar que el sensor funciona únicamente cuando se aplica la reversa. Existen incluso algunos vehículos que vienen con cámara, la cual se activa en el momento de dar reversa, claro esta que usted no le puede dar todo el control de la situación, no esta de más, mirar todo el entorno.